Articulo de Pedro Losada
Alejandro G. Iñárritu es un director que siempre ha jugado a innovarse a sí mismo y al mismo tiempo a contar una nueva historia, ni se encasilla en personajes ya creados ni tiene la facilidad de coger un estilo dentro del cine y ahondarlo hasta la saciedad. Llego en el 2000 su primer éxito con su tercer largometraje, «Amores perros», primera parte de la trilogía de la muerte, la cual estaría formada por «21 gramos» y «Babel», un drama que nos llevan a los rincones más humildes y pobres del planeta. O en esta ocasión cambiando de género y llegando a meterse dentro de la comedia. Pero no una comedia convencional, su tipo de escritura no llega a ser de las más sofisticadas, es más bien una forma irónica con la que cada uno ve el día a día. Da igual que seas rico o pobre, pues en el film que os presento da a conocer que lo que realmente vale es lo que damos, y no lo que poseemos.
El actor Riggan Thomson (Michael Keaton), un hombre muy hábil para afrentarse a los personajes que el interpreta en un escenario, pero que es incapaz de poder controlar su única vida, la real. Causa que lleva consigo uno de los personajes que le dieron la fama mundial, Birdman. Al mismo tiempo este mismo personaje le otorga una especie de poderes, que harán que pueda mover cualquier cosa, los cuales los tiene ocultos a vista de cualquier persona, ni tan siquiera su incomprendida ex-mujer llega a saber el secreto que guarda su marido. Aquí es donde empiezan sus verdaderos problemas, justamente cuando tiene una nueva oportunidad de triunfar en Broadway y llevarlo otra vez a la fama, sin que tenga que estar metido en el papel que le encasillo de por vida. Birdman. Junto a él estará un abogado y amigo Brandon (Zach Galifianakis), que no entenderá realmente lo que quiere el propio Riggan, su hija Sam (Emma Stone) seguirá todos los pasos de su padre y lo acompañara hasta donde sea. En medio un nuevo actor que puede que la obra funcione o se eche al traste, Mike Shiner (Edward Norton), un actor problemático que lo aconsejo su novia y actriz del reparto de la obra, Lesley (Naomi Watts). Todos metidos en una obra que puede ser mucho más de lo que se pueden imaginar.
Dentro de los foros de cine se llega a comentar que es la mejor actuación de Michael Keaton en su larga carrera cinematográfica, y si lo miras bien, el personaje que interpreta puede estar de alguna forma ligada a sí mismo, con el rol de Batman. Para mi es una gran actuación donde se ve al actor utilizar muchos registros dentro de un mismo personaje, los cuales habría explorado muy poco en anteriores personajes. Gracias a él se puede dar con un Globo de Oro que se llevó hace pocos días y que dentro de poco tendrá la oportunidad de llevarse el premio de la academia de Hollywood, el ansiado Óscar, y es que para ser sinceros, merecérselo, se lo merece. Al igual que Edward Norton, el cual se quedó a las puertas del Globo de Oro por el mejor actor de reparto y que tendrá una nueva oportunidad para llevarse el Óscar en la próxima edición.
El año del hombre pájaro.
Birdman es una de las películas con más nominaciones del año dentro de los premios de la academia. Película que podría haber sido una seria competidora en los premios de Los Globo de Oro sino fuera porque fueron expuestas en diferentes categorías. La película del director mexicano Alejandro González Iñárritu es sin duda una de las películas más redondas de su carrera, un drama que el propio protagonista consigue convertir todo en una comedia, una crítica sobre lo dividida que llega a estar la sociedad actual y una reflexión que te hace recapacitar si lo que estaba pasando en el interior del
personaje es porque él lo sufre o porque el atrae ese propio sufrimiento. Una persona que vive gracias a una sombra, la cual no escapa de dentro de él, y aunque lo primero que quiere es deshacerse de su personaje fetiche, su mente siempre recurre a Birdman. Terrible ¿verdad?…
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